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TAL COMO FUE AYER, TAL COMO SERÁ MAÑANA…

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Casi 300 personas participaron una vez más del Seder para toda la comunidad judía de Córdoba, organizado por el Centro Unión Israelita y Macabi Noar. Esta vez, en un escenario diferente al tradicional: el SUM del club se vio colmado y todos los presentes pudieron disfrutar de momentos inolvidables y únicos, nuevamente reunidos en comunidad.

Nuestro rabino, Marcelo Polakoff, se encargó de guiar cada uno de los pasos y actividades durante la cena. En esta tarea, fue acompañado por el seminarista Gabriel Pristzker, y juntos hicieron énfasis en la puesta en práctica de cada acción para lograr esa vivencia que todo judío necesita, y así llevar a cabo aquel “Bejol dor vador” que tanto se menciona en este Jag, y que está ligado de manera directa con la transmisión de nuestra esencia judaica, de generación en generación. Es por eso que los más pequeños tuvieron un papel clave durante la noche. Los alumnos del Gan Ierushalaim y el Nivel Primario mantuvieron una fuerte presencia en el espacio central, con la entonación de canciones esenciales de Pesaj (como el importante “Ma Nishtaná”), y por supuesto, la búsqueda del Afikoman, con la recepción de los premios correspondientes.

Para los grandes, la actividad se desarrolló desde sus sillas: las mesas se dispusieron armoniosamente, decoradas y listas para que comience el Seder. Las hermosas kearot habían sido confeccionadas previamente en el taller de manualidades del grupo de adultos mayores “Golda”. El vino ocupó cada uno de los lugares, y de a poco, los invitados comenzaron a transitar por los 15 pasos tradicionales del Seder (que, casualmente o causalmente, significa “orden”, en alusión a la estructura de la ceremonia).

Cada uno de los 15 pasos se realizó durante la noche con la guía de nuestro rabino y seminarista. Así, se leyó la Hagadá, se pronunciaron las brajot correspondientes, se realizaron los lavados de manos, se hicieron los 4 kidushim tradicionales, y por supuesto, se comieron todos los alimentos, provenientes de un excelente catering, que incluyó exquisiteces como una sopa de Kneidalaj, o una deliciosa cazuela con papas, verduras y pollo de nuestra propia faena Kasher en la ciudad de Córdoba.

En exclusiva, se presentó en comunidad el Hit “El Palito de Pesaj”, difundido en estos días y grabado por los integrantes del Coro Halevay, con el acompañamiento especial del Coro Shir Hashirim, lo que arrancó cientos de aplausos. También se proyectaron videos producidos por alumnos de nuestra escuela, imágenes que mostraron la vivencia de Pesaj en el ámbito escolar, y además, un video muy original y divertido del grupo “MacaBeats”, con una versión desopilante de “Daieinu”.

Los madrijim de juventud, encabezados por Tito Slavutsqui, hicieron su aporte con actividades para los más pequeños y dirigieron un debate general, y por mesas, acerca de una sección especial sobre los cuatro tipos de padres, basada en el texto de la Hagadá con respecto a los cuatro hijos.

Estuvieron presentes el Presidente del Centro Unión Israelita, Cdor. Hugo Waitman, y el Presidente de Macabi-Noar, Ing. Alberto Haquim.

El Cdor. Waitman, junto al Vice-Presidente del Centro Unión, Arq. Pablo Ansaldo, y al Tesorero de Macabi Noar, Edy Horovitz, también participaron de uno de los segmentos de la noche, con lecturas y explicaciones alusivas a momentos del seder.

El gran juego de la noche mantuvo a todas las mesas en vilo durante un largo rato, y fue un gran concurso de preguntas y respuestas sobre Pesaj, con indicaciones extravagantes para el momento de dar las respuestas. Entre gritos, aplausos, balidos (si, tal como lo leen), y la entonación de la canción “Aleluia”, todos los presentes se divirtieron y aprendieron un poco más sobre la festividad.

Eliahu Hanaví tuvo su momento protagónico cerca del final, con el cuarto kidush y el recordatorio de nuestra tradición, en la que dejamos una copa aguardando su entrada para el anuncio de la llegada de un tiempo mesiánico.

Mientras tanto, ya se degustaba el rico postre de brownie y helado, y se acercaba el momento del cierre, con la entonación del “Hatikva” y la presencia de una sensación inigualable en todos los presentes.

Una vez más, el seder comunitario de nuestra Kehilá nos permitió vivenciar cada parte del relato judaico y convertirnos nuevamente en protagonistas de la grandiosa historia de Pesaj, al igual que aquellos que pasaron, al igual que aquellos que vendrán…

Agradecimientos especiales

  • Madrijim de Macabi Noar.
  • Aportantes de donaciones.
  • A la escuela, talmidim y docentes.
  • Subcomisión a cargo del Seder de Pesaj.
  • Grupo Golda.
  • Cooperadora de la Escuela.
  • Bitajon
  • Y a las familias que una vez más nos han acompañado en esta hermosa noche de Pesaj que, por supuesto, es diferente a las demás noches.

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