La semana pasada les contamos la repercusión que tuvo “Mindcotine”, la APP creada por Emilio Goldenhersch, Nicolás Rosencovich y Cristian Waitman, egresados del Colegio Israelita Gral. San Martín. Esta semana pudimos conversar con ellos, a quienes les agradecemos por su tiempo, en el que nos contaron más acerca de este gran momento por el que están pasando en sus vidas…
¿Cómo viven este gran momento en sus vidas? ¿Ya cayeron en lo que provocaron y en la repercusión que generaron aquí en Córdoba, en la Argentina, en el mundo?
«La verdad, es que lo vivimos con mucha adrenalina, mucha intensidad, y con mucha felicidad también, entendiendo que la repercusión y lo que se generó en Córdoba, Buenos Aires, Argentina, es muy especial, porque es de donde somos. Más allá de que en el mundo aún no ha tenido tanta fuerza, porque por ahora repercute mucho en México y Argentina, y en Estados Unidos estarán saliendo notas y demás recien en las próximas semanas, pero básicamente es un momento de felicidad absoluta, aunque también de mucho compromiso. Es decirle al mundo que estamos haciéndolo, y lo tomamos con mucha responsabilidad; desde ese lugar también lo vivimos. Fue muy intenso desde que nació, pero el nivel de intensidad máximo fue, sin dudas, a principios de febrero, para la fecha del Super Bowl, en que Emilio y Nicolás llegaron a México y estuvimos horas, semanas, trabajando, casi sin que puedan conocer nada del D.F., y desde allí a Austin pasaron un montón de cosas en el medio. Fue un ritmo fuerte durante varios meses. Es dificil distinguir lo que provocamos estando a la distancia, pero es hermoso ver que nuestra idea o esfuerzo tenga reconocimiento.»
¿De qué se trata la aplicación básicamente, y qué objetivos esperan que cumpla? ¿Hasta dónde quieren o aspiran a llegar con ella?
«La aplicación hoy está en proceso de validación, es decir, vamos a comenzar a probar nuestras hipótesis, estamos juntando todo lo que pensamos que tiene que ser de una manera, de acuerdo a lo que los usuarios nos pueden llegar a comunicar; ese es el proceso que vamos a comenzar en las próximas semanas, y durante unos 6 meses vamos a trabajar en eso para que la aplicación pueda ser descargada y tenga las características mínimas que pretendemos que tenga el tratamiento completo. Por supuesto que la visión es poder crear un cambio en la conducta humana, en especial las adicciones, especialmente las adicciones legales, es decir, esas que son promovidas por el sistema y que, de alguna manera, no son saludables, como el fumar, el beber alcohol, comer comida chatarra, por ejemplo. Creemos que hay que hacer algo con este tipo de problemáticas y somos muy ambiciosos, soñamos muy alto. La característica de nuestro programa es que lo realizamos a través de tecnologías emergentes, en este caso la realidad virtual y, eventualmente, mindfulness (meditación guiada) y el biofeedback (técnica para aprender a controlar las funciones corporales). Además, se involucran diferentes metodologías psicológicas cuyos funcionamientos y resultados en lo que respecta a dejar de fumar, ya están comprobados.»
¿Cómo se les ocurrió este proyecto? ¿De dónde surgió? ¿Empezaron directamente buscando esto, o empezaron por otro lado y terminaron en esto por alguna razón en particular?
«Se nos ocurrió aquí en Córdoba, con Nicolás empezamos a pensar en temas de salud, prevención, diagnóstico preventivo; ideamos un proyecto que consistía en traer una plataforma en realidad virtual que existe en España para los psicólgos de Argentina, hicimos todo el plan de negocios y nos faltaba la parte de la realidad virtual, que era fundamental, y para el casamiento del hermano de Emilio, se sumó Cristian (quien vive en el exterior, pero vino a Córdoba para asistir al evento), con quien comenzamos a tener conversaciones, y nos dimos cuenta de que cada uno tenía ganas de hacer algo, desde su lado, pero que involucrara una ayuda hacia el otro; notamos que podíamos hacer confluir la ingeniería (Nicolás), la psicología (Emilio) y la tecnología (Cristian), quien ya había estado trabajando en aplicaciones que se basaban en la realidad virtual; luego de eso, en una segunda visita, nos reunimos, y decidimos que lo que estábamos planeando era muy amplio, necesitábamos ponerle un foco; cuando pensábamos en ese foco, una cosa llevó a la otra, y terminamos orientándonos al tema de las adicciones, al tema del cigarrillo, Lo buscamos principalmente por esta cuestión de poder dar una solución local a una problemática global, ese fue el tema principal y desde allí comenzó a surgir todo. El 24 de diciembre pasado, en una charla en una terraza, nos pusimos como objetivo estar en marzo en Austin, Texas, presentando nuestro proyecto.»
¿Qué sienten en lo personal, teniendo en cuenta esto de vivir el sueño de muchos? (Cualquier persona soñaría con tener una creación propia, y pasar de una planificación a la concreción del proyecto de una manera tan vertiginosa, le da como un contexto casi «de película»)
«Realmente los tres estamos muy felices, porque tiene que ver con trabajar haciendo lo que nos gusta, lo que elegimos hacer, en el mejor lugar del mundo para poder hacerlo, y con las mentes más brillantes que están haciéndolo. Definitivamente es un sueño, y definitivamente es una realidad. Entendemos que estamos creándola y para allí vamos, entonces es todo muy rápido y hay que estar muy atentos, con los ojos muy abiertos, eso es fundamental; y lo tenemos más incorporado por el tema de la comunidad; de alguna manera, sabemos vivir en comunidad. Que salga esta oportunidad, en tan poco tiempo, y teniendo en cuanta la problemática que ataca, es realmente algo muy impensado, inesperado; tener la chance de estar un año en Silicon Valley es «jugar en primera», y es algo que ninguno de los tres queremos desaprovechar, rodeados de gente muy capaz en diferentes campos, tenemos un año por delante en el que intentaremos llevar esto lo más lejos posible.»
¿Y cómo lo sienten a nivel global, representando a la Argentina, a Córdoba, a nuestra escuela?
«Está bárbaro. Los tres, cada vez que nos presentamos contamos nuestra historia, de dónde nos conocemos, y esa es la primera carta de presentación. Relatamos anécdotas, quién nos cargaba en la escuela, quién era más grande, cómo fue el colegio judío, etc. Es muy bueno poder tener un denominador común, poder compartirlo con gente, y eso, cuando hay un emprendimiento, marca una cohesión mucho más poderosa y fuerte que ser sólo simples amigos o conocidos. Uno siempre es cordobés y argentino en donde sea que estemos parados; eso es innegable, y nos sentimos orgullosos de plantarnos en cualquier lado y decir «yo soy argentino y cordobés», y muchas de las razones por las que estamos acá tienen que ver con la formación que uno recibió desde chico, en el gan, la escuela, la secundaria, Macabi, etc…»
¿Sienten que nuestra escuela les dio sus primeras bases para comenzar a desarrollar este tipo de proyectos o ideas? ¿Cómo recuerdan hoy la institución?
Emilio: «Con respecto al colegio, no se si fue específicamente el precursor de esta idea, podríamos decir que no, y también podríamos decir que sí. A la institución la recordamos muy bien, con muy buenos ojos, con excelentes vivencias, allí tuvimos las experiencias más lindas de la infancia. Yo en lo personal empecé a viajar cuando terminé el colegio, y eso me marcó también mucho.»
Cristian: «La tecnología cambió mucho desde la época en que yo iba a la escuela, en aquel entonces recien comenzaba a aparecer internet, de celulares y aplicaciones ni hablemos. Pero si se puede decir que, donde realmente las bases se sienten como responsables y formadoras, es desde el hecho de haber aprendido a pensar más allá del beneficio propio, trabajar para impactar a más gente que a uno mismo o a un entorno cercano. En ese sentido, las bases son muy fuertes. Hoy recuerdo la institución como los mejores años, mis grandes amigos de toda la vida salieron de allí, pasé miles de días en Macabi, en la escuela, en el Templo, uno debe parte de lo que hoy es, a todo eso, y yo tengo los mejores recuerdos.»
¿Que mensaje dejarían para los alumnos actuales del Colegio Israelita Gral. San Martín, quizás esos que tienen muchos sueños o proyectos como el de ustedes?
«Básicamente, les diríamos que no escuchen a la gente que les dice que no, que crean en que todo es posible, que sí se puede, que lo vivan en carne propia y sientan la experiencia. Que lo hagan, porque lo importante no es si el resultado es malo o bueno, sino poder hacerlo, concientemente, viviendo la vida con plenitud. No dejarse llevar por las opiniones de los demás, e ir hasta el fondo con lo que uno realmente quiere. Estamos en una muy buena época para emprender, estamos hiper-conectados, hay mucho acceso a la información, es cuestión de tomar riesgos, hacerlo organizadamente, con responsabilidad, formando grupos de trabajo, uno necesita la colaboración de su red, de su entorno. Digamos «Do it», que es la única manera de cumplir tus sueños.»
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