El primer año nuevo del año, aunque suene raro al leerlo o al pronunciarlo, está destinado a los principales seres de la naturaleza que nos aportan un elemento vital para nuestra vida: los árboles.
Como cada año, y organizado por el Centro Unión Israelita de Córdoba, Macabi-Noar y el Keren Kayemet LeIsrael, nuestra Kehilá se reunió en el club para la realización de un pequeño acto, pero también para poner en práctica algo que ya se volvió una sana costumbre: la plantación de nuevas especies en comunidad.
Los rabinos Marcelo Polakoff y Gabriel Pristzker encabezaron el acto. Marcelo explicó a todos los presentes el significado de la festividad, y algunos conceptos acerca del “olivo” para los más pequeños. Gabriel relató un hermoso cuento durante uno de los momentos más emotivos de la tarde: uno de los árboles fue plantado en honor y memoria de Juan Machtey (z´l); sus hijos Jorge y Ana, su esposa “Cacho”, junto a Lucho Griboff y Ana Glaser, sembraron el olivo para recordar su nombre.
Además, otros 5 arbolitos fueron plantados; cuatro de ellos, por todos los niños que participan de la colonia de verano del club; y el restante, por representantes de las instituciones judías de la Kehilá.
Betty Grynkraut y Eva Bechinsky, en representación del KKL, pronunciaron palabras hacia el público presente, instando sobre todo a los niños al cuidado de nuestra naturaleza.
Luego, y como ya es tradición, un lejaim con frutos secos le dio el cierre a una tarde cálida y amena para todos.
Como decimos cada año, ¡Shaná Tová, arbolitos!
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