La hora de nuestro gran Seder

…Kadesh, Urejatz, Karpás, Iajatz, Maguid, Rajtza, Motzí, Matzá, Maror, Korej, Shuljan Orej, Tzafún, Barej, Hallel, Nirtzá…

Podemos casi asegurar que muy pocos miembros de nuestra comunidad no regresaron a sus hogares en la noche del martes tarareando o silbando la melodía que acompaña a estos quince vocablos, tan importantes en sí mismos, que se convierten en los desencadenantes de cada uno de los pasos en los que se organiza el Seder de Pesaj.

Luego de la primera noche del Jag, en la que cada familia se reunió en su hogar para recibir la festividad, era la hora del Seder en Comunidad.

Más de 400 personas se dispusieron en el salón principal del Colegio Israelita Gral. San Martín para compartir una de esas noches que difícilmente puedan borrarse entre los recuerdos más hermosos.

Muchas familias lograron acercarse un rato antes para compartir la tefilá en el Beit Midrash Ierushalaim, el templito de la escuela, introduciéndose en la cena festiva de otra manera, y dándole inicio a la cuenta del Omer, estos 49 días que nos separan de Shavuot, cuando celebremos una vez más la entrega de la Torá en el Sinaí, lo que en la ley completa la libertad obtenida en Pesaj.Con la conducción de nuestros rabinos, Marcelo Polakoff y Pablo Gabe, uno a uno se fueron sucediendo aquellos quince pasos antes mencionados para que toda la Kehilá aprenda y disfrute de un Seder completo.

La música estuvo presente de manera permanente de la mano de Fernando Israilevich y con presentaciones del Coro Shir Hashirim, arrancando palmas y aplausos de todos los presentes, ante la alegría que nos acerca Pesaj.

Cuatro copas de vino fueron llenadas durante la noche por cada uno de los participantes, y se invitaron a diferentes representantes de nuestra comunidad para cada momento, empezando por el más pequeño del salón junto a la más anciana, para luego invitar a los dirigentes voluntarios y profesionales del Centro Unión Israelita y de Macabi Noar que trabajaron arduamente para la realización del Seder, o a los morim y madrijim presentes, aquellos encargados de la educación de nuestros jóvenes y niños. La quinta copa se llenó sólo adelante, y fue nada más que una; claro, es la de Eliahu Hanaví, y nadie puede tomar de ella.

“Ma Nishtaná” se entonó en diferentes versiones, y continúa ubicada en el puesto Nº 1 del “Top Five” de las canciones de Pesaj, seguida muy de cerca por “Daieinu”.

Los más pequeños tuvieron su participación más que especial: fueron los encargados de encontrar el misterioso “Afikoman”, aquel que se oculta luego de partir la primera porción de matzá de la noche.

Pero los más grandes también jugaron, desde sus asientos claro, a través de un juego propuesto por el grupo de madrijim del área de juventud de Macabi-Noar (quienes también aprovecharon para ofrecer un pequeño gran mensaje ligado a las 10 plagas de Egipto y nuestras 10 plagas actuales), y luego a través de un desafío matemático y judaico que trajo el rabino Marcelo.

No faltaron en el Seder los momentos sionistas que, a través de videos y explicaciones, hicieron que Medinat Israel tuviera su lugar en la noche, como corresponde.

Hubo también lugar para el humor, para el coro Halevay, para lecturas de chicos y no tan chicos, para un emotivo Hatikva con todos los participantes unidos en un abrazo, y para los más valientes, una harkadá final en el patio descubierto que le dio el toque justo para cerrar la noche danzando al igual que lo hiciera nuestro pueblo cuando salió de Mitzraim, de Egipto.

Mientras se hacían los quince pasos del Seder, por supuesto, la Kehilá realizó otra de las actividades comunitarias preferidas: comer.

Una entrada apetitosa de Guefilte Fish, un pollo (obviamente kasher) arrollado con exquisitas papas que olían a shuk de Israel, postre, masitas y bebidas, hicieron que la noche sea perfecta, emotiva y en pos de la unión familiar y comunitaria

Seder en Comunidad anunciamos hace algunas semanas, y tuvimos más de 400 razones para asegurar que el objetivo estuvo cumplido…
Bueno, podemos decir 415, no nos olvidemos de…

…Kadesh, Urejatz, Karpás, Iajatz, Maguid, Rajtza, Motzí, Matzá, Maror, Korej, Shuljan Orej, Tzafún, Barej, Hallel, Nirtzá…

* Agradecimientos especiales:

A las comisiones directivas del Centro Unión Israelita y Macabi-Noar, por hacer una vez más que el sueño de este Seder en Comunidad sea posible.
A la Sub Comisión que año a año se reúne para organizar el Seder, y que está dedicada exclusivamente a trabajar para los grandes jaguim en nuestra Kehilá.
A las familias que a través de su tzedaká permitieron que el costo del Seder sea accesible para todos.
Al Coro Shir Hashirim, y a su Director, Fernando Israilevich
Al grupo Golda, quienes se encargaron de realizar las hermosas Kearot que se distribuyeron a lo largo de las mesas
A Mirta Brontvain y el Córdoba Shuk que donó una keará preciosa para los premios
A los madrijim del área de juventud de Macabi-Noar, por su ayuda y apoyo para las diferentes actividades que se suscitaron en la noche
A Marcelo Marianoff que tuvo a su cargo la harkadá final.
A todas las familias presentes, que continúan dando su apoyo y confianza para que este Seder se convierta año a año en un evento único, necesario, e inolvidable.