El lunes por la tarde, primer día de Rosh Hashaná, reeditamos esta hermosa tradición que tanto nos gusta compartir cada año:
El Rab Gabi Pristzker encabezó la ceremonia de «Tashlij», una costumbre de origen medieval con simbolismos que llenan de espiritualidad e intensas emociones a quienes se “arrojan” a ella y que se lleva a cabo idealmente a la orilla de un río o curso de agua, y donde los principales objetivos tienen que ver con el arrojar (literalmente “tashlij”), todas aquellas transgresiones por las que reflexionamos en esta época de Iamim Noraim en la preparación para la llegada de Iom Kipur y, también, con despojarnos de todos aquellos obstáculos y adversidades internos que nos impiden concretar nuestros anhelos y deseos (un famoso Midrash vincula esa costumbre al “Satán”, presencia angélica que nos habita y nos hace siempre “tropezar”, retrasando el lograr nuestras metas).
Muchas familias de nuestra Kehilá, cada año más, se reunieron en el Parque del Kempes y emprendieron la breve caminata hacia la vera del Río Suquía, donde compartieron momentos de reflexión y meditaciones junto a al Rab, que culminó con un hermoso «Shehejianu», símbolo de unión, encuentro comunitario y gratitud a Dios por habernos permitido intentar juntos, como seres individuales, como familias y en Comunidad, mediante este “Tashlij”, emprender con voluntad reforzada un intento de renovación y de renacimiento.
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