En el marco del ciclo organizado por el Centro Unión Israelita, que genera encuentros y reencuentros de diferentes grupos de la Kehilá de Córdoba (ya lo hicieron las promociones 1982 y 1992 del Colegio Israelita), esta vez fue el turno del equipo de fútbol de Macabi Noar «+48». La experiencia fue, nuevamente, emocionante.
El viernes 24 de noviembre, el Beit Midrash Ierushalaim, bajo la organización de Néstor Visotzky, recibió a este gran grupo de amigos que compartieron incontables momentos durante sus vidas. Pero esto no fue todo; la noche hacía que confluyan muchas emociones juntas.
Por un lado, fue la primera ceremonia oficiada por el nuevo rabino Gabriel Pristzker (como rabino, claro), luego de su Tekes Hasmajá (ordenación rabínica) de la semana pasada.
Además, el servicio tuvo un condimento muy especial: contó con la presencia del rabino Gabriel Frydman junto a su esposa, quien hace algunas décadas desempeñara sus funciones en la Kehilá de Córdoba, y fuera uno de los mentores de Gabi Pristzker en aquella época. Esto sumó muchas más emociones, y numerosos recuerdos para los miembros de nuestra comunidad.
El Presidente del Centro Unión Israelita, Cdor. Hugo Waitman, también estuvo presente y dirigió palabras emocionantes para todos los que se acercaron a compartir el servicio de recibimiento del Shabat.
A través de algunos testimonios, revivimos una noche inolvidable:
Diego Jalowski: «Compartir un Kabalat Shabat en familia y con amigos fue una hermosa actividad que sirvió para afianzar y consolidar aún más lo que este grupo de futbol + 48 viene viviendo desde hace 5 años. Muchísimas gracias a Nestor, que organizo esta actividad, a Gabi Pritzker que hizo una ceremonia bella y muy profunda, como nos tiene acostumbrados, y a todo el grupo por estar siempre con todas las ganas y buena onda.»
Héctor Blejer: «Un Kabalat Shabat muy lindo y diferente. Fue muy especial, ya que nos encontramos con un Rabino que fue de nuestra comunidad, Gabriel Frydman, quien le pone mucha pasión. Por supuesto, no dejo de emocionarme ya que mi hijo colabora con el nuevo Rabino Pristzker. En dos palabras, pasión y emoción.”
Carlos Polacov: «Hermosos momentos son los que vivimos en el Kabalat Shabat del templito del colegio , y no era para menos ya que se sumaban varios acontecimientos muy importantes y trascendentes. Por un lado, la celebracion de un Bat Mitzvá, acompañado por la convocatoria de un gran número de jóvenes deportistas +48 de Macabi Noar, la visita especial del Rab Gabriel Frydman junto a su esposa Graciela, y una gran parte de la comunidad que queria estar presente en este Kabalat para dar su muestra de afecto y apoyo al nuevo Rabino Gabi Pristzker. Fue una ceremonia cargada de emocion y afecto, con unas cálidas palabras de agradecimiento de Gabriel hacia su familia en primer lugar, a su guía, el rab Frydman, a la Comisión Directiva del CUI, a toda la comunidad de Córdoba y unas sentidas palabras de afecto al Cdor. Juan Machtey, a quien consideró como un padre. Luego, fue el turno del presidente del Centro Unión Israelita, Cdor. Hugo Waitman, quien, con sus palabras llenas de emocion y afecto, se refirió al importante paso logrado por Gabriel y elogió tambien su faceta de buen compañero con sus iguales en el Seminario. Tambien enunció valiosos conceptos sobre el rabino Frydman y su sueño de tener el templito hecho realidad, y la importancia de haber iniciado el diálogo interreligioso en Córdoba. Como final de su discurso, hizo referencia a la buena relacion entre el CUI y el club para trabajar juntos con un mismo objetivo.
Fue muy reconfortante y prometedor ver una multitud compartir este Kabalat tan cargado de afecto y emoción que se veía reflejado en los rostros de cada uno de los que asistimos.»
Adrián Rosenhek: «Hace un par de semanas nos llegó una invitacion del Centro Unión Israelita para compartir un Kabalat Shabat en familia. La idea, de Néstor Visotsky, fue bien recibida por todo el grupo futbolero. Cuando hace algunos años surgió la idea de formar este grupo «+48», no sabiamos muy bien cuáles serían los resultados, y la verdad es que nos sorprendio gratamente a todos. Compartimos deporte, comidas, viajes, mucha risa, diversión y, sobre todo, buena onda. El viernes pudimos compartir una actividad más junto a nuestras familias en el templito, con una hermosa ceremonia de Gabriel y despues un lejaim. Saber que además nos unen nuestras raíces judías es muy emocionante.
No hay comentarios