Periódicamente, te contamos acerca de los encuentros y actividades que mantiene nuestro grupo de adultos mayores «Golda», sus talleres virtuales, sus reuniones presenciales, la tradición de los viernes, el entusiasmo que perdura desde hace muchas décadas.

Esta vez, compartimos unas hermosas y emocionantes palabras que nos llegaron desde una de las integrantes del grupo, Anita Bendersky:

«Aunque la esencia del ser humano no cambia, podemos asegurar, mirando hacia el pasado no tan lejano, que vivimos mejor que nuestros antecesores. Mi abuela no hubiera pensado en reunirse con otras abuelas para discutir sobre meteorología, política o las fases de la luna. Hoy, entre muchos otros grupos de adultos mayores, existe Golda, que tiene la virtud de reunir a personas de distintos pensamientos, tanto conservadores como libres pensadores, con el único objetivo de conocernos y hacer de nosotros seres más felices, capaces de abordar temas que, por ser de vanguardia, sólo correspondían a una Elite. Así se logra: al conocernos, hacemos desaparecer prejuicios y tabúes que quizás fueron fuente de nuestra formación. Cuando Liliana Pompas, con el título de Psicóloga bajo el brazo, lo pensó y se lo propuso al presidente de Noar, quizás lo soñó, y hoy es un hecho, una realidad, el grupo Golda, con otra coordinadora, Susana Taleisnik, y en otro ámbito, el Centro Unión, que es un eslabón de peso en la cadena de instituciones que forman la riqueza de nuestra comunidad. Todos conocen sus actividades y además saben que de ese grupo se desprenden integrantes hacia otras formas culturales o lúdicas que merecen el respeto y el aplauso en cada oportunidad. Por eso, señoras y señores, a quienes leen hoy estos párrafos les digo: Yo, Anita Bendersky, estoy tan contenta y orgullosa de pertenecer al Grupo Golda.»

¡Gracias por compartir tu emoción, Anita! ¡Felicitaciones, Golda!