En el día de ayer, Sheasani recibió al Rabino Alejandro Avruj en un conmovedor encuentro, al cual se sumaron muchos integrantes de la comunidad.
Agradecemos sinceramente a Macabi Noar por abrir sus puertas y prestarnos sus instalaciones, permitiendo que este evento fuera posible.
En la charla, Ale destacó la conexión profunda entre la historia del patriarca Iaakov y la actualidad de Israel, recordando el encuentro entre Iaakov y su hermano Esav, después de 20 años y el cambio de nombre de Iaakov a Israel como símbolo de transformación y unidad.
«Todos somos Israel», proclamó Avruj, instando a la audiencia de más de 200 personas a reconocer su papel en la historia y en la lucha del pueblo judío. También resaltó la importancia de entender que nuestras acciones tienen un impacto universal, enfatizando que ser parte del pueblo judío implica ser parte de su defensa.
Al abordar la situación actual en Israel, Avruj desmitificó percepciones erróneas al afirmar que los desafíos no se centran en reclamos de tierras ni en conflictos con colonos y exploró las complejidades de la historia moderna de Israel, señalando las diversas posibilidades que llevaron a la creación del estado.
Con un enfoque en la demografía, Avruj destacó la singularidad de Israel como el único estado judío en un mundo diverso. Señaló la concentración de países cristianos y musulmanes, subrayando el papel de Israel en medio de un contexto geopolítico complejo.
Avruj resaltó la importancia de la voz individual en este contexto, instando a todos a reconocer que poseen un arma poderosa en sus palabras.
Más allá de los nombres individuales, Avruj recordó a la audiencia que cada uno lleva consigo el nombre de Israel y, por lo tanto, contribuye a la historia en evolución de este pueblo.
La visita de Avruj al Espacio Sheasani fue más que un evento, fue un llamado a la reflexión y a la acción, recordándonos que todos tenemos un papel fundamental en la historia de Israel.
El Rabino enfatizó la dificultad de encontrar una salida a esta situación, subrayando la importancia de no quedarse callados e instó a todos a ser micrófonos, a no temer frente a los micrófonos antisemitas y a hablar fuertemente.
Ale relató que vivió experiencias inolvidables y emocionantes al compartir momentos significativos con los jaialim antes de que regresaran al combate en Gaza.
La noche concluyó con una sesión de preguntas e intercambio de ideas entre los participantes, destacando el compromiso y la participación activa de la audiencia en este diálogo significativo sobre la identidad, la historia y el futuro de Israel.
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