El sábado 6 de agosto de 2016 quedará por mucho tiempo en la memoria de los integrantes de nuestra Kehilá. El multifacético artista Dan Breitman hizo estallar de risa y emociones al público que colmó el salón principal del Colegio Israelita Gral. San Martin, con un show que tuvo todos los condimentos necesarios para convertirse en inolvidable.
El evento, organizado por la Cooperadora de la Escuela, a cargo de Lili Schuty, se desarrolló con una profesionalidad de excelencia, desde la organización, la recepción del público, el acondicionamiento del salón, y el interés minucioso por cada detalle, lo que resultó en una noche perfecta desde todos los aspectos. Una multitud de miembros de la Kehilá se ubicaron puntualmente para disfrutar de la gran presentación artística. El Presidente del Centro Unión Israelita, Cdor. Hugo Waitman, también estuvo presente entre el público, y como todos, se dejó llevar por las risas y las carcajadas.
Con un carisma único, acompañado de grandes dotes de talento artístico, el “showman” de la noche presentó un espectáculo en el que confluyeron segmentos de canto, baile, histrionismo, monólogos desopilantes, y mucho (pero mucho) humor que resultó en aplausos y estruendosas risas de todos los presentes. Todo esto, inmerso en un contexto de melodías y guiños permanentes con el judaísmo, sus tradiciones, su modo de vida, y una gran originalidad por parte de Breitman para traer esto al escenario. El actor, que minutos antes fue entrevistado por nuestro rabino Marcelo Polakoff para una nota exclusiva que será publicada en el Shnaton de este año, no mostró ninguna fisura durante la totalidad del show, proponiendo un dinamismo preciso, y un orden de bloques y combinaciones que fueron representados a la perfección.
La presentación atravesó por diferentes momentos, con un hilo conductor planteado por el artista, en el que se desplazaba relatando diferentes momentos de su vida, desde su infancia, el paso por la escuela, llegando a su Bar Mitzvá, la relación con su madre, sus fobias, y algún bloque para recordar diferentes personajes que lo hicieron saltar a la fama en el medio televisivo.
Una de las grandes sorpresas de la noche fue cada uno de los “popurrís” que interpretó el artista, enlazando magistralmente fragmentos de diferentes canciones de una manera muy pocas veces vista en un espectáculo, con una exactitud y destreza que requiere de un gran ensayo y complicidad con los 4 músicos que lo acompañan durante el show. Así, pudo escucharse un enganchado de “canciones bien arriba”, que en realidad son las canciones más tristes de la historia del rock nacional y latino, pero combinadas excepcionalmente bajo un ritmo alegre y movido; luego, llegó el turno de algunas canciones patrias, interpretadas al estilo “Valeria Lynch”; el ritmo continuó con un candombe dedicado especialmente a la Morá más recordada por Dan (por haberla sufrido en su infancia); uno de los segmentos más divertidos llegó con algunas tradicionales canciones de las tefilot del Templo, con baile y coreografía incluidos, y hasta una memorable representación del paseo de la Torá; el bloque dedicado a su madre se hizo presente con un popurrí de tangos, folklore, entremezclados con fragmentos de canciones en Idish; y entre otras muchas cosas, antes de terminar con mucho ritmo y baile, el actor presentó su campaña para terminar con la violencia en el fútbol, con una manera apacible de entonar las canciones de hinchada, como si fueran un adagio, o una balada de esas que arrancan lágrimas, claro, pero manteniendo las letras que se entonan cada domingo en las tribunas.
Felicitamos a la Cooperadora de la Escuela por la organización de este espectáculo de alto nivel, y agradecemos a Dan Breitman por su presencia, su amabilidad, y por la gran noche que brindó para toda la Kehilá de Córdoba.
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¡Mazal Tov!
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